Hubo un tiempo en que amonestaba a mi prójimo
si su religión no se acercaba a la mía
pero ya mi corazón asume las formas:
claustro del monje, templo de los ídolos,
prado de las gacelas, Kaaba del peregrino,
tablas de la Torah, texto del Corán,
yo profeso el credo del amor
y doquiera que él dirija sus pasos
será siempre mi fe y mi doctrina.
Tumba de Ibn Arabi en Damasco |
Puedes escuchar otro poema de Ibn Arabi con música andalusí, aquí:
Puedes escuchar a Franco Battiato aquí:
Caffé de la paix
No hay comentarios:
Publicar un comentario